Es un momento normal en el que te están pidiendo que mires a
donde no quieres mirar, simplemente te están llamando y ya sabes que está de
cada uno responder por lo menos con la mirada y es lo que estás haciendo para
que no te compliquen la vida, sabes estás muy bien donde estás y que no es tu
deseo cambiarte de sitio, de repente creen que estarías mejor en otra parte,
crees que en cualquier momento ya te dejarán de llamar, pero no saben que
decidiste que de ninguna manera dejarás lo que es tuyo, y allí ya estás
jugando, con tus manos guardas las piedritas que nadie tiene que saber que las
tienes, con tu primo George estás juntándolas, para jugar mañana entre los dos,
a Isabel no le interesan, ella es siempre independiente y sabes que mejor es
mirarlos mientras piensas como te llevas las piedritas y de pronto se te ocurre
que Charles y Henry las llevarán en sus bolsillos, solamente tienes que
pedirles, siempre hay que estar inventando juegos y a ellos les encanta nuevas
aventuras o seguramente no te harán caso, pero les gusta llenar los bolsillos,
tendrás que convencerlos.